Decálogo para un rector

¿Cuáles serán los programas de los candidatos a rector? ¿Se limitarán a vagos principios, o entrarán en cuestiones diarias que afectan a la comunidad universitaria? Muchos opinamos que ya no es tiempo (no lo hay) de grandilocuentes palabras ni de remotos principios. Ahí van diez ideas a considerar:

1. Retribuciones del personal:

Si la Universidad está transferida, lo está para todo, no para lo que interese a determinados poderes. ¿Cuándo nos homologarán los sueldos con niveles similares de la DGA? ¿Cuándo el PAS tendrá las mismas ventajas que en la DGA? ¿Se puede saber que piensan las organizaciones sindicales? ¿Qué hará el futuro rector ante esta situación?

2. Carrera docente:

¿Se pondrá en marcha la plantilla teórica sólo para crear cátedras? Si se pone en marcha, que se inicie por abajo, no por arriba, lo que facilitará estabilizar al personal, y crear una carrera docente. ¿Qué va a pasar con los TEUs?

3. Laboratorios e institutos de investigación:

Cuando en otras Universidades se ven proliferar laboratorios e institutos de investigación especializados, sorprende el escaso número de los mismos en la UZ. El trabajo desarrollado en los mismos, y la existencia de medios adecuados, permitiría mejorar los resultados de investigación y repercutiría favorablemente en la docencia.

4. Nuevas titulaciones:

El desarrollo de la UZ depende en gran medida de un mapa de titulaciones inteligente y equilibrado. Contrastan los problemas en nuestra universidad para crear nuevos estudios, con la línea de progreso del resto de la universidades españolas. El principio de "coste cero" es una traba política, a la que parecen haberse prestado gustosos anteriores responsables universitarios.

5. Recursos de investigación:

Los fondos que la UZ dedica a los proyectos propios de investigación son escasos (y en eso estamos de acuerdo casi todos). Debería llegarse dedicar un 15-20% del presupuesto global de la UZ a investigación. Si se invierte, se obtiene resultados de forma piramidal. Los productos pueden atraer nuevas inversiones, y crear un polo de I+D único en el valle del Ebro.

6. Descentralización universitaria:

Huesca y Teruel existen, y no deben ser considerados campus provinciales de segunda fila. Poseen potencial humano para desarrollar líneas especializadas sumamente provechosas. Pero necesitan equipamiento y financiación. Contrastan sus restricciones con las facilidades de La Almunia, o los "futuros" de Calatayud...

7. Mecenazgo:

La falta de mecenazgo de grandes empresas en la UZ es sorprendente. ¿Cuándo podremos ver a Pikolín, GM, Balay, Ibercaja o la CAI pagando una Universidad de Verano? ¿Y financiando un Posgrado altamente especializado? ¿No les interesa? ¿O no se ha preocupado nadie? Como antes, contrasta con la situación en otras universidades españolas...

8. Campus virtual:

Las principales universidades se encuentran en una vertiginosa carrera hacia la teleformación, la enseñanza a distancia y la aplicación de Internet y sus medios en la docencia universitaria, creando nuevos productos educativos. En la nuestra crean un índice de lugares permitidos, por llamarlo de alguna forma, a instancias de una vicegerencia (o de su jefe), intentando controlar sus prestaciones y contenidos. El control de la información y de su acceso es un clásico en los regímenes totalitarios, camuflado bajo la persiana de la "seguridad". Más valdría dedicar tiempo y recursos a desarrollar un programa de apoyo a la docencia en Internet.

9. Formación de personal:

El profesorado universitario necesita periodos de renovación, reflexión y aprendizaje. Cuando los teóricos modernos de la formación postulan la necesidad de usar el 20-30% del tiempo disponible en reciclarse, hemos de pensar en el "sufrimiento" que supone obtener un sabático o una estancia de estudios o investigación de media o larga duración. Es necesario un plan general que regule y planifique esta necesidad del PDI.

10. Impacto social y comunicación:

La UZ no se imbrica en la sociedad aragonesa... si claro, que se imbrica, y su impacto es notorio, pero no se ha sabido comunicar ni a los grupos ni a los agentes sociales. Es ineludible idear y desarrollar una política de información activa y dinámica. No basta con notas de prensa o comunicados varios. Se aprecia lo que se conoce, y lo que pasa en nuestra región es que la mayor parte de los ciudadanos no conocen el trabajo ni el potencial de la Universidad.

Puedes enviar tu opinión a los coordinadores...

Lea nuestra Presentación y la Limitación de responsabilidad para comprender el contenido informativo.